Poderosa Oración de Protección.

Enviada como un exquisito regalo al serenísimo Carlos el Grande, Emperador de Hesse y Germanía 

San León Papa ha reunido y puesto por obra la oración que sigue de las mismas palabras y preceptos de nuestra santa madre la Iglesia, y la envió a CarloMagno, diciendo: Si vos creéis firmemente y sin ninguna duda, cada día que tengáis la oración en vuestro retiro o recogimiento con devoción, y la llevares sobre vos con respeto, sea en la guerra, sea en el mar  o en cualquier parte que os encontréis, ninguno de vuestros enemigos tendrá poder sobre vos; seréis invencible y ganareis fácilmente las batallas, os librareis de los mas grandes peligros, enfermedades y desgracias, en nombre de nuestro Señor Jesucristo. Amén.

En obsequio y memoria del mismo pontífice, agradecido y lleno de fe el Rey Carlos la hizo escribir en letras de oro, llevándola siempre con el con el mayor cuidado y el mas grande respeto y devoción.

Ningún mortal puede explicar la virtud y gracia de esta oración. Si los hombres conocieran su virtud y excelencia, la dirían cada día con mucha fe , y no dejarían de llevarla siempre consigo, de tal manera que no se encuentra ninguna persona que diga que habiendo recitado esta oración  se haya visto abandonada de Dios en todas sus necesidades, y que no haya  alcanzado lo que deseaba, y la experiencia innegable de haberla hecho conocer a otros. Así  el que lo diga cada día con devoción, y la lleve consigo con respeto, no tendrá ninguna alteración en el alma ni  en el cuerpo, guardando los mandamientos divinos, por la gloria y alabanza de Dios todopoderoso, de la gloriosa Virgen María su Madre y toda la corte celestial, por cuyo medio sera preservado del hierro, del agua, del fuego y de una muerte repentina . El diablo no tendrá ningún poder sobre el, no morirá sin confesión, y su enemigo no le podrá hacer mal, ni durmiendo ni en camino, y en cualquier parte que este, no sera  nunca vencido ni hecho prisionero.

Esta oración es maravillosa contra las tempestades,truenos y rayos, y si se dice encima de un vaso de agua bendita haciendo aspersiones o bendiciones en forma de cruz al sitio o nublo , al instante se acabaran la tempestad  y los truenos.

Si se encuentra dentro del mar, diciendo la oración  3 veces no le sucederá aquel día ningún accidente funesto  , ni tempestad; y si se dice 3 veces sobre una persona  que este posesionada de ella el mal espíritu ,sea por el o por una otra persona a su nombre, tendrá una vela bendita encendida en la mano derecha y  sera libre inmediatamente.

Si alguna mujer se encuentra en peligro de parto, se le dará una vela bendita  encendida y se le dirá la oración , y se vera luego libre del parto. Si alguno se ha de poner en camino antes de marchar que la lea, o la haga leer y la lleve encima, que no tendrá  ningún accidente en su viaje, de ninguna manera, si viene a morir se salvara por que tendrá tiempo de formar un buen acto de contrición por la gran misericordia de Dios que obra por esta oración, lo cual ha sido experimentado por muchas personas.

También tiene propiedad de servir contra toda clase de encantos, y encantamientos,sortilegios,caracteres,visiones, ilusiones, posesiones, obsesiones, impedimentos, ligamentos, maleficios del matrimonio.y todo lo que nos pueda suceder por arte de brujas, o incursión del diablo. También contra todas las cosas que puedan ser dadas a los caballos y yeguas, bueyes, ovejas y otras especies de animales etc.

Crux mihi salus:

Crux ets quam semper adoro;

Crux mihi refugium;

Crux domini mecum

OTRA

Oración para  preservarse de todo  mal, particularmente del poder y artificios del maligno espíritu

Dios mío, cuyo principio es apiadarse y perdonar al pecador, acoged benigno mi plegaria, y haced por vuestra clemencia y piedad que yo y cuantos estén atados con el lazo de la culpa sean desatados y absueltos; también os ruego, Señor, que mediante la intersección del glorioso  mártir San Cipriano seamos libres de todo maleficio y poder del maligno espíritu. Amén

ORACIÓN

Bienaventurada Madre del Señor, puerta del cielo siempre abierta, astro hermoso, que sirve de guía a los pecadores que navegan en el mar borrascoso de este mundo; tú con pasmo de la naturaleza concebiste y pariste a su Creador; Virgen y santa Virgen, que recibisteis la salutación del Arcángel San Gabriel, acuérdate de los miserables pecadores  que acuden a ti como su refugio. Amén

Nueve Ave Marías.